Cuando hablamos de la tradición textil de Chiloé, nos referimos a un Arte cuyo medio para la creación es la lana, una fibra animal obtenida de ovejas de criadores locales, las ovejas son parte del paisaje, territorio siempre verde en este archipiélago al sur de Chile. La fuente para el desarrollo de textiles en esta parte del mundo tienen su origen en un cúmulo de saberes heredados de antiguos pueblos originarios que más tarde enriquecerían las técnicas aportadas por los europeos, las revistas de tejido y las tecnologías de tintes sintéticos importados. Por otra parte, dentro de esta tradición existen procesos de elaboración y tratamiento del material lanar, como el lavado y escarmenado, hilados de diferentes tipos en huso o rueca, teñidos con cortezas, líquenes, raíces, hojas y anilinas, por último el tejido en telar Quelgo, palillo y crochet, sin dejar fuera técnicas de uso reciente como el fieltro agujado y amasado.
Desde muy antiguo la elaboración de tapices ha sido un medio de expresión de diferentes culturas del mundo: encontramos tapices y tejidos muy elaborados que nos cuentan del modo de vida y creencias de culturas prehispánicas que habitaron el altiplano de Chile, Bolivia y Perú, donde cada comunidad tuvo sus propias técnicas de tejido y simbología asociada a ellos. En Europa existe la tradición de Gobelino, un pueblo de Francia que realizaba tapices murales para la nobleza, en el cual se contaban relatos míticos o se glorificaba la hazaña de algún rey. Más tarde, durante el movimiento de arts & crafts, se retoma la tradición medieval de los antiguos artesanos para elaborar piezas utilitarias y decorativas realizadas a mano, destaca la obra de Williams Morris, tal vez uno de los abuelos del diseño industrial. En la década de los sesenta, aparecen el arte conceptual, la instalación y la performance, expresiones artísticas que tienen en común salir de la tradición e incorporar nuevos materiales y medios para la creación, a veces convergiendo en el Arte Textil, más allá de materias orgánicas, se incluyen los metales, acrílicos, deshechos, madera y cuanto pueda ofrecer la post-modernidad… En la actualidad los textiles toman un nuevo rumbo con la aparición de la impresión 3D, tecnología que permite no solo realizar piezas artísticas y vestuario, sino también, herramientas de alta gama e incluso órganos vitales para el ser humano.
La inspiración para este proyecto de creación textil, nace desde la experiencia de tejer a partir de los saberes adquiridos en la investigación y relación con mujeres de la ruralidad. Actualmente resido en el sector de Terao, comuna de Chonchi. Este lugar se ubica en la costa Este frente a Isla Lemuy, desde donde es visible la Angostura de Detif hasta Punta Bruja, ya era registrado por las misiones circulares del siglo XVIII y mencionado como “Feran”. Aquí existían comunidades indígenas que vivían en sus rucas entre los bosques y muy apartadas unas familias de otras. La comunidad erigió una capilla a principios del siglo XX, según la escuela chilota de arquitectura religiosa, y actualmente se mantiene en pie, junto a ella hay un cementerio antiguo con pintorescos mausoleos de madera. Actualmente la costa se encuentra plagada de boyas pertenecientes a cultivos de choritos por un lado y el centro de cultivo de salmón Camanchaca por el otro lado, la presencia de esta empresa es una fuente de trabajo de varias familias de éste y otros sectores cercanos. Sin embargo, estos monocultivos también son responsables de la contaminación costera y la basura del entorno, destacando la plumavit o poliestireno disperso en las playas, las redes en desuso, bolsas de pellet y otras porquerías.
Anteriormente, hace veinte años atrás, cuando era adolescente y caminaba por la playa, podía encontrar estrellas de mar, anémonas, mariscos variados y pececitos bajo las piedras, hoy no hay más que un barro negro y hediondo en las costas vacías y una línea de plumavit y plástico que señala el límite de las mareas…
La inspiración o visión para la creación de los Tapices, es cruzar el horizonte de lo tradicional para abrir un conjunto de evocaciones al paisaje natural y cultural del sector de Terao, incluyendo Detif y Huillinco como sectores geográficos diversos, donde isla y lago, participan transcritos en la trama como color y textura, formato, vacío y lleno de ciertas piezas. Por otra parte en lo referente a la ejecución técnica, los Tapices tienen como materia prima principal la lana de oveja y sus procesos de hilado, teñido tejido, sin embargo al cruzar horizontes o canales la creación de las piezas también conlleva a desanclar y navegar en el tiempo cronológico en que se están tejiendo las mismas, esto se traduce en formato y materialidades diferentes a la lana de oveja y a la búsqueda de formatos y texturas que permitan la expresividad del Arte Textil en Chiloé.
Fondart Regional / Cultura Tradicional y Popular. 2021.
Creación de tapices desde la tradición textil de Chiloé.
Folio : 595671.